“Una bonita mañana” (Un beau matin, 2022) de Mia Hansen Love.
Léa Seydoux, Melvil Poupaud, Nicole García, Pascal Gregory, Camille Leban Martin’s.
Sandra visita a menudo a su padre, Georg, afectado por una enfermedad neuro degenerativa. Mientras se vuelca junto a su familia en una dura lucha entre hospitales y residencias de ancianos para encontrar un lugar adecuado para su padre, Sandra se encuentra de casualidad a Clément, un amigo que había perdido de vista, y con quien empieza una relación apasionada pero incierta. Quizás la parte menos conseguida del film.
A su vez debe dedicar un tiempo a su hija de 8 año Lynn y su trabajo como traductora.
La directora de “El porvenir”, esposa del también director Oliver Assayas, se basa en su propia vivencia cuando su padre fue diagnosticado con esa cruel enfermedad . Su cine tiende a ser autobiográfico o a retratar experiencias de sus familiares cercanos; y de esta manera, ‘Una bonita mañana’ forma un estimulante díptico con ‘El porvenir’, donde Isabelle Huppert interpretaba a una profesora de filosofía, inspirada en su madre. Ambas son lo mejor que ha filmado su autora, que aquí vuelve a proclamarse como una cronista de las relaciones inter familiares. Abandonando la complejidad de su anterior película, ‘La isla de Bergman’, la cineasta vuelve a la aparente sencillez de sus primeros trabajos.
Se exponen temas de peso (la muerte cercana, el dolor, la pérdida, las relaciones de pareja, etc.) bajo una visión delicada. Hansen Love nunca se excede en las desgracias a las que se enfrentan sus personajes, sino que consigue algo realmente complicado: tratarlas con ligereza y que esta no sea trivial, sino una reivindicación como la única forma posible de salir adelante. Es una obra vitalista pero no particularmente efusiva, triste pero no afectada.
Excelente Léa Seydoux, la gran protagonista, plena de matices y Pascal Gregory, el padre, que borda en su semi silencio, con miradas y presencia de calidad y detalle su enfermedad y su realidad.