“Cuestión de sangre”(Stillwater,2021) de Tom McCarthy Matt Damon, Abigail Breslin, Camille Cottin Me quedo con una frase que dice el personaje de Virginie (estupenda Camille Cottin), actriz y marsellesa cuando ve como Matt Damon, rudo norteamericano de Oklahoma hace una sopa de kétchup para la hamburguesa de su hija (muy bien interpretada por Lilou Siauvaud ): “cuando veo lo que coméis entiendo porque rezáis antes”. Un notable Matt Damon encarna a un rudo, religioso y parco obrero ahora en paro, que vive en Stillwater (Oklahoma) y que lucha por demostrar la inocencia de su hija(Abigail Breslin), condenada por asesinato en Marsella.En este caso el superhéroe es sencillamente un padre.Bill (Matt Damon), viaja a Francia con la intención, como digo, de sacar de la cárcel a su hija condenada allí por el presunto asesinato de su novia. A partir de la llegada a Marsella del protagonista, la película revierte el patrón del héroe estadounidense común que lucha por su familia contra un sistema injusto en una tierra considerada hostil. Bill asume enseguida que en su misión necesita de la ayuda inesperada en este caso de una actriz de teatro francesa, Virginie (Camille Cottin) que vive con su.hija . El film desarrolla la relación a priori imposible entre dos personajes que en otras manos habrían quedado reducidos a arquetipos culturales: Bill, el clásico votante de Trump, hombre de mediana edad, clase trabajadora, conservador y religioso, y Virginie, la típica francesa intelectual de izquierdas.. Es en esos apartados de las relaciones personales de Bill con su hija y del mismo en su relación primero de amistad con Virginie y luego como pareja, es cuando la película sube muchos enteros y nos hace casi olvidar la trama principal y la resolución de la culpabilidad o no de su hija , con búsquedas de posibles involucrados en la Marsella más profunda, conflictiva y pobre. El film comandado por Damon , en la que para mí es su mejor interpretación, baja enteros en esa resolución tan improbable como increíble lo cual no resta méritos para calificarla con buena nota . El director de la oscarizada “Spotlight” vuelve a demostrar su buen pulso narrativo y su especialidad como creador de personajes y situaciones.
