En memoria del icónico músico Ryūichi Sakamoto, nos sumergimos en la fascinante obra cinematográfica “Monstruo” (Kaibutsu, 2023), dirigida por el renombrado Hirokazu Koreeda. Esta película, protagonizada por Soya Kurokawa, Hiiragi Hinata, Sakura Ando, Eita y Mitsuki Takahata, representa un hito en la filmografía de Koreeda, conocido por joyas como “Un asunto de familia” o “Still Walking”. “Monstruo” retoma la perspectiva múltiple de los hechos, una técnica narrativa similar a la empleada por Akira Kurosawa en su película “Rashomon”.
Inicialmente, “Monstruo” parece explorar temas de adolescencia, búsqueda de identidad infantil y acoso escolar, pero rápidamente se convierte en una trama mucho más compleja que involucra a dos jóvenes, dos familias desestructuradas, el cuerpo directivo de una escuela y un profesor presuntamente involucrado en el acoso de un alumno. La narración fragmentada que utiliza Koreeda le permite jugar con el espectador, suscitando la conciencia de la complejidad de la realidad y la reflexión sobre nuestra tendencia a aceptar, incluso como espectadores, todo lo que se nos presenta en pantalla.
La habilidad del director japonés para crear personajes humanos con gran profundidad, a veces a partir de detalles mínimos, vuelve a ser evidente en esta película. Aunque al principio pueda parecer desconcertante el relato que constantemente nos oculta información, gradualmente las piezas del rompecabezas encajan y quedamos atrapados en un conflicto personal de difícil resolución. Es aquí donde entran en juego los dos niños protagonistas.
El concepto recurrente de la palabra “monstruo” que sobrevuela toda la película también la convierte en una reflexión sobre quién realmente es el monstruo. La respuesta, que cambia de un personaje a otro a lo largo de la trama, se convierte en un elemento de crítica social al final de la película. Koreeda retrata con precisión las dificultades de los entornos familiares marcados por ausencias, violencia y un sistema educativo presionado por los padres.
Una vez más, Koreeda demuestra su maestría en la narración y su habilidad para abordar cuestiones profundas como la muerte, la honra, la enfermedad, la justicia y la ingenuidad de la infancia con gran sensibilidad. Las escenas de juego de los niños y su refugio en un vagón abandonado se convierten en secuencias simbólicas cargadas de significado, defendiendo la inocencia que el mundo adulto amenaza con destruir. Sin embargo, algunas de las conclusiones de la película pueden parecer forzadas en su intento de transmitir su mensaje.
Koreeda logra construir una narrativa sutil y hermosa, con un enfoque decididamente humanista, destacando la inocencia y la perspectiva de los niños en un mundo que a menudo amenaza con arrebatarles la belleza de la vida. En última instancia, la clave de toda la historia radica en el amor, un tema central que permea toda la obra.
“Monstruo” (Kaibutsu, 2023) de Hirokazu Koreeda es una película que, al igual que las obras de Nani Moretti y Erice, se posiciona entre lo mejor del año. En tan solo 10 días, Koreeda nos regala una película que se erige como un privilegio para los amantes del cine japonés y los aficionados a la narrativa cinematográfica rica y conmovedora.