Amor de madres .”La hija” (2021) de Manuel Martín Cuenca, Javier Gutiérrez, Patricia López Arnaiz, Irene Virgüez, Juan Carlos Villanueva . Irene (Irene Virgüez), es una chica de catorce años que vive en un centro para menores infractores. La joven, que está embarazada de tres meses, decide aceptar la ayuda de Javier (Javier Gutiérrez), uno de los educadores del centro. Javier ayuda a Irene a escaparse del centro y decide esconderla en su propia casa, situada en lo alto de una montaña y aislada del pueblo. Allí vive también su mujer Adela (Patricia López Arnaiz). La única condición que pondrá el matrimonio a la joven será quedarse con el bebé que está gestando, sin embargo, Irene empezará a arrepentirse de su decisión tras empezar a sentir cosas por la vida que lleva dentro. Con esta trama –a ratos sorprendente, por momentos previsible, cargada de tensión sobretodo en la parte final , con toques hasta truculentos de un Martín Cuenca que desmenuza el lado más miserable de la condición humana a partir de la necesidad imperiosa de lograr algo, en esta ocasión, tener descendencia. Algo tan básico y animal puede derivar en obsesión y envidia y empujar a realizar actos deplorables, como la mentira, el secuestro y la manipulación. Todo ello está servido por el cineasta con una gran elegancia formal , con un aprovechamiento de los espacios más que expresivo y con unas localizaciones naturales en Jaén y la Serranía de Cazorla–en distintas estaciones del año– tan majestuosas como dramáticas.También la pregunta ¿Cual es la mejor madre?la biológica , aunque sea una adolescente con problemas o la adoptiva de clase alta que no puede tener hijos y posiblemente tratará mejor al bebé que va a venir. No obstante al final el cineasta se decanta con la trama principal y no por las secundarias y se va al cine de suspense, de tensión y de terror en que se mueve como pez en el agua.Y todo empieza con una niña-madre que tiene miedo a los perros .Y hasta aquí puedo contar.
