CARY GRANT. 18/1/1904. In memoriam a Archibald Alexander Leach.
El Dandy por excelencia.
“A Grant no lo diriges, simplemente lo pones delante de la cámara. Hasta de espaldas es buen actor. La audiencia se identifica con su personaje de inmediato. Representa al hombre que conocemos, nunca resulta un desconocido para nadie”. Alfred Hitchcock
Extracto del libro de Memorias de Cary Grant:
“La primera vez que me presenté a una prueba para encontrar trabajo en el cine, el resultado del test fue así de negativo: “Tiene las piernas arqueadas y el cuello demasiado grueso”. Imagino que Dios habrá perdonado a aquel examinador de futuros talentos, pero tal vez no el estudio de Hollywood donde trabajaba”.
Interpretándose a sí mismo
“Suelen decir que yo siempre me he interpretado a mí mismo. Puede que sea así, pero no resulta nada fácil. Adoptar la verdadera imagen de uno mismo es algo que no todo el mundo sabe hacer; la mayoría de la gente tiene una imagen equivocada. Y lo peor del caso es que la mantiene”.
1980 en un viaje a España.
“¿Qué sí el presidente de España, Adolfo Suarez, actuó como figurante cuando yo rodé aquí Orgullo y pasión? No lo recuerdo, la verdad, pero tampoco me extrañaría. Al principio de mi carrera yo fui figurante muchas veces y por eso no hay que temer que me convierta en presidente”.
Periodista: ¿Piensa a menudo en la muerte?
“- La verdad es que no sé cómo considero a la muerte. Tengo muchos amigos que lo han estado haciendo últimamente. Esto de morirse es una mala costumbre y además, tienes que ir al funeral de los demás.
Divorcios
“Me he casado cinco veces y conozco el asunto. El divorcio es algo muy peculiar, pero que acaba reduciéndose a un juego entre buenos abogados”.
Hitchcock
“Hitch era maravilloso. A menudo, la prensa ha comentado que trataba a los actores como si fueran ganado. Bueno, seguramente es lo que hacía con los malos actores. Conmigo hubo una maravillosa amistad, basada en la confianza mutua. Tenía la gran cualidad de permitirte que fueras tú mismo; con él todas las escenas eran fáciles y se podía actuar con naturalidad”.
Anécdota.
El director de cine Peter Bogdanovich contó que en 1971, fue Cary Grant al Beverly Wilshire Hotel para asistir a una gala en honor a John Ford. En recepción abordó a una de las señoras encargada de controlar las invitaciones.
: _ ¡Hola! Lo siento mucho, señora, pero me he olvidado el ticket en casa. ¿Puedo entrar, por favor?
La señora le lanzó una mirada escéptica.
_ ¿Cómo se llama usted caballero?
C.G.:
_ No se parece usted a el -dijo la señora-
Sin pausa y como si se tratara de una réplica de alguna de sus comedias, el actor contestó con gran entusiasmo.
C.G.: Ya lo sé: ¡nadie se parece a mi.
Epitafio
“Me gustaría que en mi tumba figurara la siguiente inscripción: “Tuvo suerte y lo sabia”.